Nuestra Filosofía / Turismo / Turismo responsable
Qué gran disyuntiva, ¿no? Desde luego que es uno de los grandes problemas al que nos enfrentamos hoy en día y no he dejado pasar la oportunidad de hablar sobre esta cuestión que me ha brindado la Revista Namaste, un mensual gratuito independiente sobre ecología, movimientos sociales de vanguardia y crecimiento personal, que se edita en las Islas Baleares. El turismo puede ser un potente generador de riqueza y una inestimable ayuda para salir de la crisis que nos acompaña ya desde hace demasiado. Pero sólo si se utiliza bien y con una perspectiva a largo plazo, conciliadora con los destinos donde se desarrolle y nunca bajo una perspectiva colonizadora y generadora de estereotipos que, en nada, se parecen a las costumbres y tradiciones locales.
Si queréis leer online el artículo completo, podéis pinchar en el siguiente enlace:
TURISMO DE MASAS vs. TURISMO RESPONSABLE .- Revista Namaste (Mayo)
Si lo preferís, podéis hojear la revista en papel a través de su página Web pinchando aquí (pág. 41)
Sólo me queda darle las gracias a Alberto Fraile, el director de Namaste, por la oportunidad. Sin duda que necesitamos a más gente con su filosofía, plasmada en las páginas de la revista, para salir adelante. ¡Gracias!
Javier Tejera
Formado en comunicación y turismo, fue en el sector turístico donde precisamente comenzó a apreciar la necesidad de un giro a la hora de viajar y practicar turismo. Considera que un viaje responsable no sólo se reduce a una adecuada práctica medioambiental, sino que debe resumir todas las habilidades que se suponen implícitas a las buenas relaciones personales, aunque no siempre es así. Tal vez resulte paradójico pensar que todo viaje debe convertirse en un intercambio social y cultural, pero... ¿por qué no intentarlo? Con experiencia profesional contrastada en medios de comunicación y en entidades públicas y privadas dentro del sector turístico, es uno de los fundadores de Ecotumismo y lleva la gestión editorial y coordinación de proyectos desde su puesta en marcha en 2009. En esta última etapa de su vida profesional ha adquirido experiencia nacional e internacional en el marco de proyectos vinculados al turismo responsable trabajando como consultor freelance a través de Ecotouristing. Además ha adquirido un notable conocimiento de la realidad actual del sector del turismo rural en España, gracias a su trabajo como responsable de comunicación y coordinación de proyectos con la Fundación Ecoagroturismo. A principios de 2013 se ha incorporado al equipo del portal de turismo temático Turinea para dar soporte en tareas de comunicación y marketing, además de desarrollar el proyecto Rutas turísticas y Paisajes Sonoros. Una innovadora iniciativa para poner en valor una red de rutas turísticas basadas en experiencias sensoriales etnográfico-culturales y ambientales, con la premisa de fomentar un tipo de turismo responsable y sostenible. Se enfatizará el carácter innovador del proyecto a través de herramientas sonoras al servicio de las nuevas tecnologías, que servirán como elemento clave de conservación cultural, como instrumento de promoción y como hilo conductor de las diferentes propuestas.
Hola Javier,
Me acabo de leer el artículo. El título, tengo que decir, que me parece muy desafortunado.
No se puede contraponer las masas a la responsabilidad, ya que parece que sólo las minorías pueden ser responsable, cuando lo que se necesita es que todos seamos más responsables y sostenibles, tanto el mochilero como el turista que va a Benidorm, un destino mucho más sostenible que irse Costa Rica en avión…
A veces, que un pequeño espacio absorba una gran cantidad de turistas puede ser muy positivo. Volviendo a Benidorm… ¿Cuántas casas rurares habría que construir para meter a tantos turistas?
Todo lo anterior, es de un punto de vista estrictamente medioambiental, porque está claro que el turista de pulserita no va a conectar con el destino sino a desconectar de su vida cotidiana. Ahora, ¿s realista pretender que todas las vacaciones sean un acto de encuentro intercultural?
Ahora, te felicito por enfatizar el doble filo del turismo, que ciertamente lo tiene y también por dar un toque de atención cuestionando el perfil de turista que España intenta atraer…
Desde un punto de vista estrictamente empresarial, está claro que España necesita reinventarse, y no solamente hacer un lavado de imagen, sino cambiar su estructura turística para poder generar experiencias más satisfactorias para los turistas, no sólo compitiendo en precio, porque ahí no hay mucho que ganar…
Hola Carlos,
Las diferentes opiniones siempre enriquecen un debate pero, en este caso, no estoy de acuerdo con el enfoque que le has dado a la primera parte de tu exposición, porque creo que estás tergiversando lo que he escrito.
Desde mi punto de vista, el título no pretende ni mucho menos contraponer la responsabilidad a las masas y creo que dejo bien claro que, en el turismo, la responsabilidad depende de la decisión personal de cada uno a la hora de afrontar sus vacaciones. No se trata de que una cosa conlleve que la otra no se dé o viceversa, se trata de exponer que implican ambos conceptos. En ningún momento cierro la puerta a que la responsabilidad vaya sólo aparejada a los mochileros ni a un turismo de minorías.
Que un pequeño espacio pueda albergar a una gran cantidad de turistas puede ser positivo, pero hasta cierto punto. Los extremos no son buenos y Benidorm se lleva la palma de los extremos. De esto he hablado ya varias veces en el blog y siempre he dicho que, para atraer 1.600.000 turistas al año, tiene el modelo más sostenible posible. De eso no hay discusión… si sustituímos sus maravillosos rascacielos de hormigón por casas rurales, necesitaríamos media España para recibir a tanta gente.
Otra cosa es que el término sostenibilidad se pueda emplear tan a la ligera, porque conlleva aspectos que van más allá de ser capaces de recibir a un ratio de más de 40 turistas por metro cuadrado en temporada alta, como es el caso… Si lo miramos en función de la huella ecológica de una persona que se desplaza desde España, está claro que es más sostenible irte a Benidorm que a Costa Rica, pero el problema es que al final, cada uno emplea el término según le conviene y eso tampoco debería ser así.
No se trata de ser unos ilusos pensando que todo viaje tiene que suponer una increíble experiencia intercultural, vuelvo a repetir que hay un término medio para todo. Lo siento, pero si para desconectar de tu vida cotidiana necesitas ponerte una pulserita y enclaustrarte en la irrealidad de un hotel, es que entonces tienes un problema personal con tu vida y, eligiendo esta opción, lo único que estás haciendo es apoyar un modelo, respetable y todo lo que tú quieras, pero que a la larga acaba siendo insostenible con el destino donde se desarrolla, no sólo en términos medioambientales, sino sobre todo en aspectos sociales, culturales y, aunque pueda parecer una contradicción, económicos.
Un saludo!
Hola Javier,
Si parece que al final estamos de acuerdo en todo!
Saludos,
Carlos
Hola Carlos,
Estoy seguro de que coincidimos en muchos puntos de vista, pero también hacen falta debates así, para concretar y ampliar la visión de las cosas.
Así que como te digo siempre, estás invitado a participar cuando gustes.
Un abrazo
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