Reflexiones / Turismo / Turismo responsable
Aprovechando el día Internacional de la Mujer que se celebra el 8 de marzo nos conviene a todos hacer un ejercicio de autocrítica porque, a pesar de los innegables avances vividos en los últimos años, la realidad a día de hoy es que no existe una igualdad efectiva entre el hombre y la mujer en muchos ámbitos. En un contexto de crisis como el actual en donde, en general, asistimos a un retroceso de derechos laborales y económicos, se pone de manifiesto aún más el peligro de aumentar esa brecha de género. El sector turístico es, en ese sentido, un buen termómetro para medir esa situación. Según el Informe mundial sobre las mujeres en el turismo 2010-2012, a pesar de que las mujeres forman un gran colectivo dentro del sector turístico a nivel mundial, se observa que la mayoría de las mujeres empleadas se concentran especialmente en los puestos de trabajo poco cualificados, poco remunerados y precarios. El sector turístico se caracteriza, precisamente, por necesitar una gran cantidad de este tipo de mano de obra en sus primeras fases de desarrollo, para expulsarla cuando un destino alcanza la madurez, etapa en las que se requiere de trabajadores cualificados para mantenerlo a flote, tal y como indica Jordi Gascón en la introducción del libro El turismo en el inicio del milenio.
Ese proceso en muchos destinos del mundo se ha retroalimentado del catastrófico éxodo rural que está acabando con la sostenibilidad del campo en muchos lugares, empezando por España. Ese éxodo lo ha protagonizado en buena medida la mujer, que se ha ido a la ciudad o a incipientes destinos turísticos en busca de trabajo y dando de lado antiguos modelos hereditarios que priman al varón como sucesor de los negocios rurales familiares. Hace años el difícil acceso de la mujer a estudios universitarios superiores implicaba baja cualificación, pero esa tendencia ha cambiado y la realidad dice que, hoy en día, las mujeres están mejor preparadas que nunca. Por el contrario, su presencia en puestos directivos, no sólo dentro del sector turístico sino en cualquier otro ámbito, es a veces simbólica y mucho menor que la masculina. Para muestra tres datos:
- En la Unión Europea la diferencia salarial entre ambos sexos ante el mismo tipo de trabajo es del 16 por ciento, porcentaje que en el caso de España se eleva al 22 por ciento
- En España, la tasa de presencia femenina en los consejos de administración de las empresas es del 29,02 por ciento
- En Europa, sólo uno de cada siete miembros en los consejos de administración de las grandes empresas europeas es mujer, a pesar de que representan el 60 por ciento de los titulados de la UE
Hablando específicamente del sector turístico, ante las mismas condiciones de trabajo las mujeres ganan entre un 10 y un 15% menos que los hombres y la proporción de ministras de turismo frente a homólogos masculinos es de una a cinco, según el mismo informe sobre las mujeres en el turismo 2010-2012. En cualquier caso, hay un dato muy recurrente y es que por cada mujer empresaria que hay en cualquier otro sector económico, en el turismo hay dos, lo que da una idea del gran papel que ha tenido la mujer desde la perspectiva del emprendimiento turístico en los últimos años. Sobre todo partiendo de pequeños negocios familiares, en donde gran parte del trabajo no remunerado ha sido ejecutado por las mujeres. Ese “know-how” ha desembocado en la creación de iniciativas empresariales más estables, que conviene apoyar y potenciar por todo el mundo. Una tendencia que ante un día como este hay que resaltar. Está más que demostrado que la igualdad de género en el mundo empresarial es rentable y debemos empezar a predicar con hechos más que con palabras.
Javier Tejera
Formado en comunicación y turismo, fue en el sector turístico donde precisamente comenzó a apreciar la necesidad de un giro a la hora de viajar y practicar turismo. Considera que un viaje responsable no sólo se reduce a una adecuada práctica medioambiental, sino que debe resumir todas las habilidades que se suponen implícitas a las buenas relaciones personales, aunque no siempre es así. Tal vez resulte paradójico pensar que todo viaje debe convertirse en un intercambio social y cultural, pero... ¿por qué no intentarlo? Con experiencia profesional contrastada en medios de comunicación y en entidades públicas y privadas dentro del sector turístico, es uno de los fundadores de Ecotumismo y lleva la gestión editorial y coordinación de proyectos desde su puesta en marcha en 2009. En esta última etapa de su vida profesional ha adquirido experiencia nacional e internacional en el marco de proyectos vinculados al turismo responsable trabajando como consultor freelance a través de Ecotouristing. Además ha adquirido un notable conocimiento de la realidad actual del sector del turismo rural en España, gracias a su trabajo como responsable de comunicación y coordinación de proyectos con la Fundación Ecoagroturismo. A principios de 2013 se ha incorporado al equipo del portal de turismo temático Turinea para dar soporte en tareas de comunicación y marketing, además de desarrollar el proyecto Rutas turísticas y Paisajes Sonoros. Una innovadora iniciativa para poner en valor una red de rutas turísticas basadas en experiencias sensoriales etnográfico-culturales y ambientales, con la premisa de fomentar un tipo de turismo responsable y sostenible. Se enfatizará el carácter innovador del proyecto a través de herramientas sonoras al servicio de las nuevas tecnologías, que servirán como elemento clave de conservación cultural, como instrumento de promoción y como hilo conductor de las diferentes propuestas.
