Una nueva EDUCACIÓN para el enriquecimiento personal y creativo de los alumnos

Con casi toda probabilidad, la educación debería ser la política de Estado que mayor cuota de responsabilidad debería suponer a la clase política de un país. La educación lo es todo… en tiempos de crisis y de recesión como el actual, la educación supone poner la semilla para un futuro mejor. La educación es la base de una sociedad próspera, viva, inquieta, que evoluciona de forma consecuente, en la medida en que las diferentes generaciones son capaces de formarse y de cultivar su espíritu crítico y vocacional. Por el contrario, al menos en el caso de España y a pesar de la famosa coletilla de política de Estado, la educación ha sido una auténtica marioneta que ha cambiado de cara en función del color político imperante. Décadas de democracia y ni un solo acuerdo entre los grandes partidos, con seis leyes orgánicas desde 1978, coincidiendo con todos los cambios de gobierno, de lo que se deduce que una de las primeras cosas a cambiar es el sistema educativo anterior. Algo que demuestra que el partidismo de la última, la del señor ministro Wert, no es ni mucho menos una excepción, aunque en este caso tenga el dudoso honor de haber puesto de acuerdo a la práctica totalidad de la comunidad educativa por su sesgo y ánimo de politizar las aulas.

Más allá de eso, la tónica de la nueva política educativa en España reside en el objetivo de ser más pragmáticos, de eliminar asignaturas de humanidades para primar cuestiones que tengan una supuesta mayor salida laboral en la sociedad de hoy en día. ¿Para cuando un análisis más profundo y real de las causas del fracaso escolar ligado al desarrollo de muchos niños? El concepto tradicional de centro educativo que se ha impuesto en el último medio siglo se ha basado en los mismos principios que marcaron el desarrollo industrial  y capitalista de las fábricas. Niños tratados como piezas en serie que han de aprender, memorizar y expulsar temarios, como si de máquinas automáticas se tratasen en muchos casos, sin tener en cuenta sus inquietudes, gustos, motivaciones o simplemente métodos que, lejos de obligar, traten de implicar. Los últimos tiros demuestran que la dinámica se mantiene: en lugar de formar personas con inquietudes, lo que se pretende es producir actores a imagen y semejanza de la sociedad que quieren unos pocos y, por supuesto, que piensen lo menos posible.

Hoy en día existen nuevos paradigmas educativos que nada tienen que ver con esta realidad y que se basan en el concepto integral de Comunidad de Aprendizaje, en donde la educación no comporta únicamente una relación unidireccional profesor-alumno, sino multidireccional, no sólo profesor-alumno-profesor, sino además teniendo en cuenta todo el entorno alrededor de los alumnos. ¿Acaso la familia, los padres y madres o los vecinos no son parte fundamental e indisociable de lo que es un niño o un adolescente? Se hace más necesario que nunca lograr que la enseñanza se sustituya por el aprendizaje y el cumplimiento de programas por el desarrollo integral de los alumnos, primando su curiosidad, sus inquietudes y sus deseos de aprender. Fórmulas en definitiva para construir estructuras flexibles que se adapten a los intereses, inquietudes y necesidades de los niños/as, los profesores/as y las familias.

¿Por qué expongo todo esto? Esta Navidad he tenido la ocasión de conocer de primera mano una iniciativa esperanzadora que, sobre todo, supone todo un ejemplo de que otra manera de hacer las cosas y de enfocar la educación, es posible. El IES (Instituto de Enseñanza Secundaria) Marina Cebrián de Taco (Tenerife) ha obtenido el premio al centro educativo más sostenible dentro de la Red Canaria de Centros Educativos para la Sostenibilidad (RedECOS). El galardón ha sido entregado primando acciones que fomentan la formación y la educación para la adquisición de valores que propicien conductas compatibles con el desarrollo sostenible. El centro, por cierto público, ha sido capaz de articular acciones conjuntas con diferentes niveles educativos que han enseñado e inculcado valores a los alumnos en el plano no sólo medioambiental, sino también social o solidario. Proyectos como ‘Las tres RRR en el aula’, un ‘Mercadillo y rastro solidario’ o un ‘Huerto escolar’, coordinado en este último caso por Carlos Merino (profesor de Educación Física), que luce espectacular en el patio del centro, son sólo algunos ejemplos, además de todo tipo de talleres, salidas y visitas.

Beatriz González, coordinadora del proyecto en el IES Marina de Cebrián (Tenerife)

Más allá de todo eso y según Beatriz González, profesora de apoyo, de NEAE (Necesidades Educativas Especiales) y coordinadora del centro para RedECOS, lo realmente destacable es el grado de implicación y de motivación, no sólo de la práctica totalidad de los alumnos, sino incluso de padres, madres y de todo el barrio en muchas de las acciones. Alumnos que no tienen el mejor de los rendimientos escolares, en un entorno social complicado, resulta que han demostrado actitudes y aptitudes sorprendentes, en una perspectiva educacional que se ha salido de los modelos convencionales pre-establecidos, primando otras cuestiones probablemente más importantes para el enriquecimiento personal y creativo de los alumnos. ¿Para cuando un cambio de óptica? ¿Queremos personas plenas para un mundo mejor o piezas que encajen con un engranaje caduco y obsoleto? La respuesta está en el IES Marina de Cebrián en Tenerife.

Javier Tejera

Formado en comunicación y turismo, fue en el sector turístico donde precisamente comenzó a apreciar la necesidad de un giro a la hora de viajar y practicar turismo. Considera que un viaje responsable no sólo se reduce a una adecuada práctica medioambiental, sino que debe resumir todas las habilidades que se suponen implícitas a las buenas relaciones personales, aunque no siempre es así. Tal vez resulte paradójico pensar que todo viaje debe convertirse en un intercambio social y cultural, pero... ¿por qué no intentarlo? Con experiencia profesional contrastada en medios de comunicación y en entidades públicas y privadas dentro del sector turístico, es uno de los fundadores de Ecotumismo y lleva la gestión editorial y coordinación de proyectos desde su puesta en marcha en 2009. En esta última etapa de su vida profesional ha adquirido experiencia nacional e internacional en el marco de proyectos vinculados al turismo responsable trabajando como consultor freelance a través de Ecotouristing. Además ha adquirido un notable conocimiento de la realidad actual del sector del turismo rural en España, gracias a su trabajo como responsable de comunicación y coordinación de proyectos con la Fundación Ecoagroturismo. A principios de 2013 se ha incorporado al equipo del portal de turismo temático Turinea para dar soporte en tareas de comunicación y marketing, además de desarrollar el proyecto Rutas turísticas y Paisajes Sonoros. Una innovadora iniciativa para poner en valor una red de rutas turísticas basadas en experiencias sensoriales etnográfico-culturales y ambientales, con la premisa de fomentar un tipo de turismo responsable y sostenible. Se enfatizará el carácter innovador del proyecto a través de herramientas sonoras al servicio de las nuevas tecnologías, que servirán como elemento clave de conservación cultural, como instrumento de promoción y como hilo conductor de las diferentes propuestas.

Ecotumismo te recomienda

El proyecto LASOS: la necesidad de generar espacios de acción colectiva hacia una isla de Tenerife más sostenible y autosuficiente

14 Dic 2016 - Ecología

Reiniciando el planeta desde CONAMA 2016

13 Dic 2016 - Ecología

La metáfora de un mundo más sostenible a un siglo del buque insumergible

04 Dic 2015 - Ecología